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Asociación de Investigadores/as AfroLatinoamericanos/as y del Caribe
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BITÁCORA  AFRODIASPÓRICA Transitando los temas de la diáspora africana en América Latina y el Caribe.

Adán Pineda Olaya

Adán Pineda Olaya es Licenciado en Ciencias Sociales por la Universidad Pontificia Bolivariana, Medellín y Mg. en Antropología Aplicada. Instituto Misionero de Antropología (IMA) y miembro de AINALC.

La ombligada: Filosofía de vida, conexión con la espiritualidad y método/patrón para formar al hombre afrocolombiano en el Pacífico
Adán Pineda Olaya

      En el Pacífico colombiano, en particular en las poblaciones afrocolombianas de los ríos y zonas rurales, todo niño que nace debe ser ombligado con la naturaleza. El proceso tiene tres momentos: En primer lugar al momento del nacimiento se separa el ombligo de la placenta, la placenta es enterrada y en ese mismo lugar se siembra un árbol que en adelante será el vínculo que conecte al nuevo miembro de la comunidad con el territorio y la naturaleza misma. En segundo lugar cuando cae el ombligo, es decir la sección del ombligo que ha quedado adherida al niño, a ésta se le hace un tratamiento especial de conservación; que representa la “prolongación de la existencia del niño en el mundo de los vivos” (Eteo 2013, p 175). En tercer lugar, precisamente al caer el ombligo del niño, se hace un proceso de curación con elementos naturales que han sido escogidos cuidadosamente teniendo en cuenta las características que se quieren potenciar en el niño y reducidos a polvo mediante procesos culturales. Todo ello, evidencia una filosofía de vida, conexión con la espiritualidad y método/patrón para formar al hombre afrocolombiano.

Filosofía de vida

      Cuando se va a ombligar un niño, los padres deben decidir que característica, cualidad, habilidad o protección quieren o desean para el niño, para poder potenciarlo hacia allá, de allí que el objeto que se seleccione para unirlo al ombligo del bebe, debe responder a la condición definida por los padres. Es una nueva relación entre el niño y el elemento con que se le ombliga; por eso, a través del ombligo y el elemento ombligador, se origina la transmutación, para que el sujeto pueda hacer uso de éste en su vida adulta.De esta manera, en el Pacífico Colombiano se ombliga a un niño pensando en su futuro, preparándolo para que pueda afrontar las dificultades que se le presenten en sus relaciones socio-culturales y de supervivencia. El ritual de curar el ombligo del bebé con polvitos, consiste en que a los varones por ejemplo, se les ombliga con polvillos de cola de ardilla, para tornarlos rápidos y con los de piel de tapir para convertirlos en hombres fuertes e indomables. En tanto, que el polvo de oro se utiliza para que ni hombre ni mujer vuelvan vacíos de la mina, es por eso que cada persona debe conocer con qué ha sido ombligada, porque en el instante de la muerte, luego de una enfermedad en la que ya no existe posibilidades médicas y sólo le espera la muerte, hay que des-ombligarse usando el mismo polvillo. Hay que romper el vínculo hecho, afirman los mayores, con la convicción del poder de la sabiduría tradicional. Entre las características más usadas al ombligar un niño, se encuentran las siguientes: fuertes física y mentalmente (son ombligados con árbol de guayacán, chachajo, palma crespa, guayabo, animales que tengan mucha fortaleza, uña de la gran bestia); con habilidades de trepar (ardilla grande o pequeña); pelear y nadar (anguilla, nutria; se hacen difícil de agarrar pues su piel se pone resbalosa durante la pelea, tienen rapidez); trabajadores (arriera); para labrar la tierra (armadillo); hacer grandes huecos, entre otros. Zapata (en Mina 2006, p.175) afirma, “cada ser humano que nace tiene la experiencia creadora de la humanidad que le ha antecedido y tiene la experiencia creadora de la realidad que está viviendo”.

Conexión con la espiritualidad

     El afrodescendiente, ya sea nacido en África o en América, ha tenido en la espiritualidad la fuerza, el aliado, la fortaleza para sobreponerse a las vicisitudes, que históricamente han tenido que afrontar ya sea por razones endógenas o exógenas. En este sentido, es donde toma importancia la definición de una identidad y una identidad territorial del ser en humanidad, en una relación espacio- territorial, que transciende el tiempo cronos y se convierte en tiempo perpetuo, porque la identidad es tiempo y espacio, que se configura en una territorialidad; es un pasado vivo, que como tal, convoca a todos lo que mueven el presente y el futuro, para ponerlo en el ahora; es un tiempo perpetuo, en el que el pasado es un presente. Hoy sabemos que un ser humano aún colocado en la más extrema incomunicación, extrañado de su medio natural, expoliado de su cultura, mientras subsista físicamente, constituye una célula capaz de recrear y enriquecer sus ideas, hacerse a nuevos medios expresivos y nuevas formas de herramientas adecuadas para generar por sí solas, o por asocio de otras los valores tradicionales de su cultura de origen. (Zapata, 1999, p.78)

Método/patrón para formar al hombre afrocolombiano en el Pacífico

     El momento del nacimiento, en el que la partera transmuta en ombligador-a, ésta se encarga corte del cordón umbilical y de aplicar los elementos necesarios para evitar infecciones, se realiza la plantación del árbol o la planta al enterrar la placenta para que sirva de alimento a la planta, así como también cuando se le hace entrega de las características del ser con el cual se le emparenta en el momento de su nacimiento; el segundo momento de este ritual está comprendido en cada una de las visitas que realiza la partera con el fin de revisar al menor, así como también de asear y verificar que esté sanando adecuadamente.

     Cuando los familiares de un niño que ha llegado recientemente a la familia, toman la decisión de ombligarlo con uno u otro elemento, está pensando en el futuro de este niño y a través del elemento seleccionado, se crea un vínculo entre el sujeto y el objeto que potencia su espiritualidad y al mismo tiempo su cuerpo material; es de alguna manera, una búsqueda del bio-poder que existe entre el sujeto y en el objeto, extendiendo la relación que se establece en el vientre entre la madre y el hijo, a través del cordón umbilical; esta vez, dicha relación está en la fusión sujeto ombligado - sujeto ombligador. Así mismo, con esa planta que se siembra junto a la placenta del niño, los padres hacen un trabajo psíquico con el infante, que va a desarrollar en él la identidad territorial; sentirse parte de ese territorio, pertenecer al lugar, más que por otra cosa por el vínculo creado y acuñado durante la educación, en el seno de la familia. Sumado a lo anterior, Zapata (1999) afirma, “muy difícilmente la psicología cultural y la socio-antropología podrían reconstruir los mecanismos generados por los afrodescendientes para asegurar la supervivencia física en un mundo agresor que destruía por igual su vida, su conciencia, su conducta y su cultura” (p. 96). Situaciones como estas, requieren más que fuerza física, se hace necesaria una fuerza interior que pueda soportar todas estas cargas y aun así, mantener en pie la humanidad del ser. Esta fuerza, es la identidad ligada a lo territorial, desde una profunda espiritualidad, que se pueda transmutar en un sujeto en humanidad.

Trasmutación

     De esta práctica cultural emerge un vínculo que configura la identidad de la persona afrodescendiente con el territorio, sociedad y cultura. La ombligada, es significativa para la comprensión de la relación del hombre y la mujer afrodescendiente con el mundo y la cosmovisión del grupo étnico. Se requiere ombligar la identidad territorial, a partir de las posibilidades de formación que potencia la educación en los sujetos. Desde luego, siempre las comunidades han ombligado al sujeto con la naturaleza. En esta parte, recobra importancia el papel de la educación como unidad integradora del sujeto en procura de la formación del individuo para insertarse en un mundo sin escindirse de su realidad y cultura.


Referencias:

Eteo, S. J. F. (2013). Los ritos de paso entre los bubi. Universidad Autónoma de Barcelona. Facultad de filosofía y letras. Departamento de antropología social y cultural. Tesis doctoral.

Zapata Olivella, Manuel (1983). Chango El Gran Putas. Letras Americanas: Santa Fe de Bogotá .

Zapata Olivella, Manuel (1999). Las Claves Mágicas de América. Segunda edición. Plaza & Janés: Santa Fe de Bogotá

Zapata Olivella, Manuel (s.f.). El árbol brujo de la libertad, África en Colombia, orígenes – transculturación – presencia. Ensayo histórico mítico. Universidad del Pacífico. Buenaventura Valle.


 

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